Hoy me ha costado muchísimo escribirte una carta. Así que para encontrarle fuerza decidí hacerlo distinto: ¡Cambié!
Aún me ayudan las herramientas digitales pero he tomado la fuerza de mi puño y letra. Siento que me han movido las horas del reloj y me siento como una araña fumigada. Se alteró el tiempo y se suman las malas noches con la cabeza gira que gira. ¡Hay muchas cabezas girando!
Santa Teresa de Ávila decía en su libro “El castillo interior” que la cabeza es “la loca de la casa”. Y es así…
Llevo todo el día con peso. Como si fuera una nube gris. Todo se siente denso: el aire, el movimiento del cuerpo, los sonidos. Al cambio de ritmo hay que sumarle que ahora el día es más largo y hay que estar muy despiertos.
¿Qué sientes tú? ¿Puedes describirlo? Si le encuentras las palabras, pierde peso. ¿Puedes detenerte a analizar cómo las personas de tu entorno te perciben? Aquí afuera, los niños saben y entienden el estado de emergencia y le muestran su mejor cara. ¡Juegan con el tiempo y el espacio!
¿Qué tanto estás aprovechando este tiempo para observar? ¡Es histórico! Por eso hoy, decidí cambiar y escribir de puño y letra. ¿No lo ves? Escribimos todos los días desde un teclado adaptado a un dispositivo. ¡Es más rápido! Hemos desarrollado una memoria dactilar, pero ¿en dónde está nuestra memoria histórica?
¡Ojalá recibieras esta carta por correo tradicional! Solo para cambiar. ¡Seguro que te gustaría más! Vería mi esfuerzo y el tiempo que he invertido para hacerte sentir mejor.
Todo en la historia ha empezado por ahí, por un trazo sobre un lienzo.
Tengo que agradecerte mucho por mis ganas de escribir, ¡hasta de querer el gris! Mi amiga Ana dice que su color favorito es el gris. Ella y yo somos muy creativas. Además, nos gusta la buena publicidad. El otro día, le conté de un anuncio que hizo una marca inspirado en su color favorito. Decía esto:
“Si empiezas algo nuevo, empieza por el gris.
Si estas bloqueado, recurre al gris.
Si no estás de acuerdo ni con unos ni con otros, refúgiate en el gris.
El gris es el lugar donde empieza todo.
La zona neutra que nos permite imaginar sin condicionamiento previos.
El refugio de los que no comulgan con el pensamiento binario. El color del “depende”,
ni blanco, ni negro: ¡GRIS!
El gris permanece frente a los colores que pasan de moda.
Es la variedad: tienes miles de tonos y matices.
Es la elegancia frente a la policromía estridente.
El gris son los matices que nos obligan a pensar mejor.
La materia gris que sostiene nuestro cerebro.
Cuando todo se mantiene inestable, incierto e inexplicable…
¡Siemre estará el gris!”Campaña de la marca NEW BALANCE incuida en la Revista Yorokobu
Y todo lo anterior para decirte que hoy cuando me sentía GRIS, me encontré con otra campaña de la misma marca.
Quizá este momento tan lleno de gris quiera decirnos algo. Quizá aceptar que hay cosas que tenemos que cambiar nos liberará el peso y nos dará visión, calma y confianza.
Yo solo sé que mi letra ya no se siente pesada y que veo más color, y eso te lo debo a ti. ¡Estamos juntos en esto! Tu me animas a mí, yo me inspiro de ti.
¡Fuerza!
TGB
“Escribe una carta” fue una iniciativa emprendida durante el confinamiento del COVID19 en España. Algunas palabras han sido adaptadas para poder animar a cualquier persona que enfrente una enfermedad de cualquier tipo.
Es un proyecto hermano del podcast Latitudes. Ambos tiene por propósito generar la reflexión y poner en valor los valores, a través de las humanidades.
Los audios de estas cartas estarán disponibles en ivoox, spotify y apple podcast.
